MEMORIA
El Teatro Avenida se inauguró el 3 de octubre de 1908 con la actuación de la compañía dramática de María Guerrero y Fernando Díaz de Mendoza, que estrenó «El castigo sin venganza» de Lope de Vega. Actualmente, es uno de los tres teatros porteños más antiguos que sigue en actividad, y una de las más prestigiosas casas de ópera del país.
Desde su nacimiento, es una joya de la Avenida de Mayo, el primer bulevar de Argentina y Sudamérica. La fuerte presencia de inmigrantes españoles en la zona impuso a la sala teatral como la preferida para los géneros ibéricos. Cada artista que venía del viejo continente sentía como destino natural presentarse en el Avenida. Zarzuela, flamenco y obras de teatro españolas abarcaban toda la programación.
Luminosa y con un estilo arquitectónico que atraía al público de la élite porteña, la sala del Teatro Avenida se consolidó en Buenos Aires por su imponencia, caracterizada por su estilo imperio en clave modernista.
En su interior predominan las líneas curvas y la decoración en racimo. Cartouches, cariátides coronas, grecas y hasta efigies son algunos de los elementos que componen la ornamentación del interior. En su fachada se puede ver la marquesina, cubierta por mansarda con óculos, lucarnas y chimeneas.
Su acústica, potenciada por su composición en forma de herradura y el cortinado, junto a las paredes, pisos y butacas, hizo que el Teatro Avenida sea un espacio ideal para la ópera y el concierto de orquesta.
ero la enérgica actividad del teatro se vio paralizada por un incendio en el edificio contiguo, el 3 de abril de 1979, que provocó un derrumbe en algunas partes del foyer y la sala. Tuvo que suspenderse la obra que estaba a punto de estrenar: El diluvio que viene.
El teatro permaneció cerrado y su deterioro fue notable. Hasta que en 1987 un consorcio español terminó con ocho años de abandono y formó una sociedad anónima, “Reconquista del Teatro Avenida”, para adquirir el edificio, reconstruirlo y administrarlo.
Con fidelidad a su estilo, se respetó la arquitectura de la sala y finalmente, llegó la reinauguración el 19 de junio de 1994. La noche de gala estuvo a cargo del tenor Plácido Domingo, la cantante española María José Montiel y las prestigiosas intérpretes locales Paula Almerares y Cecilia Díaz, junto al Coro Polifónico Nacional (Julio Fainguersch) y la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires (Miguel Roa).
Desde fines de los ‘90 hasta la actualidad irrumpió fuertemente el concierto clásico, el ballet y sobre todo, la ópera, géneros que se consolidaron como característicos del teatro. El propio Gustavo Cerati trajo en 2001 sus “11 Episodios Sinfónicos”, adoptando la estética y el sonido característico del Avenida. Una noche para el recuerdo.