Los procesos de relocalización involuntaria de población que vive en villas y asentamientos constituyen un gran desafío para los pobladores, organizaciones de la sociedad civil y sus gobiernos. Los equipos profesionales de estos últimos, tienen que diseñar, planificar y llevar adelante las acciones apropiadas, en un marco de protección de derechos, que logren no solo liberar los asentamientos, sectores o áreas a mudar, sino también trabajar sobre el gran impacto que generan estos procesos en términos sociales, habitacionales y urbanísticos. En este sentido, el abordaje del hábitat desde una óptica multidimensional es fundamental a la hora de dar soluciones adecuadas y específicas en contextos de desigualdad y pobreza. En el caso del barrio 21-24, la relocalización es parte de una de las acciones que dictaminó la Corte Suprema de Justicia al sancionar en el año 2008 el saneamiento ambiental de la cuenca Matanza- Riachuelo. Los objetivos que persigue este fallo son: 1) Mejora de la calidad de vida de los habitantes de la cuenca. 2) Recomposición del ambiente en todos sus componentes (agua, aire y suelo). 3) Prevención de daños con suficiente y razonable grado de predicción. Según el censo de población realizado en el 2011 por el Instituto de Vivienda de la Ciudad de Buenos Aires (IVC), y las diferentes actualizaciones posteriores, residen el camino de sirga en la 21-24, 1524 familias. Las primeras 107 se mudaron al Conjunto Habitacional (CH) Padre Mugica (Av. Castañares y Gral Paz) en el año 2013, permitiendo la primera parte de la construcción del camino en el “centro del meandro”. En el año 2015, se aprobó en el Instituto de Vivienda de la Ciudad de Buenos Aires un protocolo de actuación para llevar adelante de manera integral y socialmente responsable, la complejidad del proceso del abordaje territorial. En él se define que la relocalización involuntaria de población es un proceso “extendido en el tiempo y en el espacio, es decir, se inicia mucho antes de que la población se traslade y termina mucho después del acceso a una nueva vivienda, y que requiere un abordaje integral y atento a sus singularidades” Posteriormente, en el 2019 se relocalizaron 192 familias al Conjunto Habitacional Mundo Grúa (Iguazú y Ribera) y 128 al Conjunto Habitacional Osvaldo Cruz (Osvaldo Cruz y Luna). Actualmente, están en construcción los CH Alvarado y Orma, próximos recibir a las siguiente familias relocalizadas. El recorrido que nos proponemos realizar comienza por el CH “Mundo Grúa” , situado en Iguazú 1885, se recorrerá por las calles interiores del conjunto para continuar por el sector de San Blas, donde se está construyendo el camino de sirga. Se sigue bajando desde San Blas por la calle 8 de diciembre hasta la calle Luján. Desde ahí, recorrer el “centro del meandro”, volver por la calle Zavaleta hasta la calle Osvaldo Cruz. En Osvaldo Cruz y Luna, entrar al conjunto habitacional. El recorrido finaliza yendo desde el CH Osvaldo Cruz hasta el CH “Orma”. Memoria de autor
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